Un abrazo, qué tan necesario puede ser un abrazo?

Me apretujas, me estrujas y me asfixias… pero, sí que necesitaba un abrazo tuyo!!!

Mientras ayer iba en el bus pensaba en ti, en la oportunidad de verte después de tanto tiempo, en las palabras del último mail que me enviaste, a veces si se puede lo que se quiere. No se me pasaron por la cabeza aquellos pensamientos de “me recibirá bien?, se alegrará? Quizás esté demasiado ocupada y ni me pesque”… no, al contrario, sólo pensaba en tu cara cuando me vieras, cuando te diera la sorpresiva visita porque sé que aunque han pasado muchas cosas y mucho tiempo hay algo aún más grande que nos une y me lo hiciste sentir al segundo de abrir la puerta de tu oficina… tu abrazo me hizo sentir tanto cariño, sentirme tan querida como no había sentido en muchísimo tiempo… y confieso que me desarmas.

Recibo tanto de ti que mi alma queda en estado de shock y sumergida en una paz tan exquisita que quisiera hacerla eterna. Si, sé que otras personas me quieren, pero tú… tú logras derrumbar toda muralla, saltar todo obstáculo, hacer caso omiso de mi frialdad y llegar directo a mi corazón de una forma impresionante… y es que, tú nunca me has pedido nada y me lo has dado todo en cinco segundos…!!